Dentro de las distintas barajas de Tarot están las que son tan únicas que casi nunca se observan. En este caso existen mazos muy especiales como el Tarot del Hada de Azúcar. Muestra extraída de la famosa obra para ballet de Tchaikowsky, el Cascanueces.
Desde la antigüedad las Hadas han sido adoradas como seres mágicos que muy raras veces aparecen ante los ojos del humano pero que son poseedoras de secretos y habilidades místicas.
En este caso las cartas son basadas en sus poderes y de allí proviene su energía.
Historia del Tarot del Hada de Azúcar
Como se decía anteriormente el Tarot es extraído de una de las obras de danza y música más famosa de todos los tiempos. Originalmente la secuencia de música del Cascanueces donde aparece la susodicha Hada estaba compuesta para ser ejecutada con un instrumento a modo de harmónica de cristal puro. Después fue cambiado por algo llamado Celesta y en esta modalidad aún hoy se utiliza.
En la historia una niña es congratulada en Navidad con un muñeco de soldado que hace las veces de Cascanueces. Este en un sueño cobra vida e invita a su dueña a un país mágico donde habita el Hada de Azúcar, de este concepto es donde se ha extraído el extraño mazo de cartas para Tarot.
Tirada de las hadas
Para realizar la tirada correspondiente se inicia, como en toda tirada, con un corazón dispuesto y la mentalidad correcta para consultar con las energías positivas de la tierra y el universo. Se baraja el mazo y se eligen 3 caras al azar.
Al hacerlo se piensa en la pregunta o el asunto que preocupa, cada carta representa un aspecto importante. La primera muestra el presente, el futuro y la tercera la resolución final. Igualmente se puede marcar como la respuesta sí o no de una duda específica.
En el amor